El Defensor del Pueblo, figura representada en la actualidad por Soledad Becerril, ha celebrado el hecho de que la Administración haya dado “luz verde” a un protocolo “para que el personal sanitario en formación respete el derecho a la intimidad de los pacientes hospitalarios”, tal y como pidió.
Según expone esta institución, “es habitual la presencia en centros sanitarios de estudiantes y residentes que, junto al médico responsable de la atención, examinan y reconocen a pacientes, sin el previo consentimiento de éstos”. Ante ello, solicita “que se establezcan unos criterios de actuación comunes de respeto al derecho a la intimidad y a la confidencialidad de los datos del paciente”.
“Que se creen en los estudiantes y residentes hábitos de conducta acordes con estos derechos”, es la otra reclamación planteada por el Defensor del Pueblo, que añade que los alumnos en formación “deberán ir identificados para que los pacientes sepan quien está presente en su proceso asistencial”.
“También será necesario pedir un consentimiento informado para que personal en formación esté presente y tome parte en consultas médicas”, continúa esta figura, que agrega que el protocolo “también establece unos controles de acceso más rigurosos a los historiales clínicos por parte de los estudiantes”.