La gestión de datos y de la historia clínica electrónica se ha convertido en uno de las aspectos más delicados de la actividad diaria de los profesionales sanitarios. Tanto que juristas como Ricardo De Lorenzo, socio-director de De Lorenzo Abogados, advierten de que “el mayor nicho de reclamaciones en el ámbito sanitario va a ser por la confidencialidad de datos personales y clínicos” contenidos en las historias, y “no por la vía administrativa, sino penal”.
Ha advertido de que “se ha producido en cascada una serie de sentencias en el ámbito legal”, con penas de cárcel de entre dos y seis años, más la inhabilitación, que dura más en el caso de haber accedido de forma indebida a datos clínicos personales (de seis a 12 años) que en el de rebelión (se seis a 10 años).
“En el ámbito penal, el delito es muy grave. Simplemente con la entrada al historial, ya hay delito”, ha indicado el presidente de la Asociación Española de Derecho Sanitario, quien ha advertido de que “los médicos creen tener derecho a acceder a las historias clinicas, pero solo pueden hacerlo en aquellos casos en los que haya vínculo profesional”.
También ha querido aclarar; “No me planteo que un médico vaya a actuar de mala fe. Este es un nicho de reclamación del que el médico no es consciente, y hay que advertirle de ello”.
Formación
Estas cuestiones se han abordado en la mesa de debate Confidencialidad e Intimidad del Paciente, celebrada en el marco del XVII Encuentro Global de Neumología, organizado por Sanitaria 2000 con el auspicio de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) y con la colaboración de Air Liquide Healthcare, Linde, Oximesa, Novartis y Rovi. En ella los profesionales han reconocido la preocupación ante la situación de inseguridad jurídica que genera la protección de datos clínicos. “Es necesario que en Medicina se profundice, como formación, en la gestión de datos y de la intimidad del paciente y de la confidencialidad de los datos de historias clínicas. Hay que respetar la confidencialidad de los datos de los pacientes y que tampoco se puede acceder a los datos del paciente sin legitimación para ello”, ha incidido Cristina Gómez Piqueras, inspectora de la Subdirección General de la Inspección de Protección de Datos.
Juan Carlos Penciña, jefe de Servicio de Tecnologías de la Información de la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León, ha reconocido que “las herramientas están preparadas para facilitar el acto médico, a no ser que el paciente pida que un informe quede bloqueado. Sí es verdad que hay un acceso genérico universal, y los profesionales deben saber qué están haciendo, porque pueden infringir la ley”, ha añadido. “Falta conocimiento y concienciación por parte de los profesionales”.
Miedo
“La ley de protección de datos nos da miedo a los médicos”, ha reconocido Carlos Ruíz Martínez, jefe de Servicio de Neumología del Hospital San Pedro, en Logroño, quien ha matizado que el problema no está solo en el sistema público de salud, sino también “en Isfas, Muface y Mugeju”.
“Pero en la práctica clínica hay que entrar en las historias”, ha objetado. “Tenemos un problema de comportamiento, de desinformación. Pero esto no nos va a eximir de delitos con penas de inhabilitación o de cárcel. Y todos los días se producen acceso a las historias sin la autorización de los pacientes”.
Perfiles
Por ello Marco López, médico adjunto de Neumología del Hospital Clínico de Salamanca, ha indicado que “tendria que limitarse a la información de la historia a la que se accede según el perfil. Un perfil para enfermeras, uno para residentes…”. Así mismo, también ha llamado a reforzar el conocimiento sobre protección de datos en la formación universitaria de los sanitarios.
En cambio, Juan Antonio Vargas, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid, ha advertido que no ve tanta complicación o riesgo. “Mi interpretación es que respecto al código deontológico siempre se ha cumplido la protección de datos” y ha recordado que esta cuestión se aborda en asignaturas de la carrera de Medicina relacionadas con humanidades médicas y bioética.
